LOS MISMOS PAISAJES III
El
olor perfecto de la tierra llega hasta mi olfato,
busca
nido y se refugia en silencio.
Es
el mismo aroma de selva húmeda el que persiste desnudo ante mis
sentidos.
Y
el aroma de ciudad,
que
se levanta despacito
y
se anuncia sobre los tejados húmedos;
Y
los aullidos de lobos domesticados se alejan a cada paso,
son
lobos mañaneros que despiertan con el canto de los gallos,
pero
ya no importa,
Las
mismas imágenes de selva y de ramas deliciosas regresan anunciando
la llegada de nuevos amaneceres en medio de mis sueños,
ante mis pasos;
Pasos
presurosos.
Y
nuevamente el olor perfecto de la tierra se posa en mi camino.
LO
QUE LES CUENTO
(Sobre
mi ciudad)
Mi
ciudad se engalana de calles
y
de caricias matutinas,
Mi
ciudad juega con los niños de altas clases sociales;
pero
también lo hace con aquellos despojados miserables
Mi
ciudad
Con
sus soledades,
y
sus noches estrelladas;
y
sus miradas juveniles
Mi
ciudad crece como niño plagado de historias,
ronda
al campesino que deambula por sus propias calles, dejando atrás los
cultivos y la tierra. Recorre mi ciudad, el hombre y su familia.
Recorro
mi ciudad
Queriendo
sembrar las mismas ilusiones bajo un suelo de cemento.
Mi
ciudad sorprende.
Se
viste de techos de cartón pero también lo hace de mármol,
de
calles polvorientas,
y
se debate diariamente entre el hambre y los manjares.
Mi
ciudad un día nació, y creció,
y
se hizo fuerte,
Mi
ciudad, que cada vez la veo más grandiosa
se
pone triste, de vez en cuando
Y
de vez en cuando se viste de verde;
y
es cuando más me gusta,
ésta,
mi
ciudad
Junto
a las montañas tapizadas de colores,
llegó
justo una mañana para quedarse infinitamente en mi recuerdo.
El
día transcurría lento acompañado por el viento fuerte de los
llanos,
el
aire golpeaba fuerte nuestro olfato;
ya
no era uno en el espacio,
Ahora,
el
aire revolotea, se purifica, entonces a través del néctar de la
vida regresa sonriente a nuestro olfato;
verde
pasto,
verde
vida
verde
esperanza.
Y
se hace oasis,
y
luego su mirada fija hacia el horizonte,
su
deseo es volar,
fuego
en las entrañas del cosmos
vida
que renace
...hacia
el infinito,
como
un pájaro,
voló
La
ciudad despierta húmeda
Cubre
con su llanto el asfalto que anuncia el nuevo día
La
luz se expande enormemente
Sus
rayos nacientes crean un arco iris de ilusiones
Cuando
las paredes se llenan de nostalgia, la ciudad lanza aullidos de dolor
Es
hora de permitir palabras escondidas bajo los asfaltos roídos por
mensajeros de las noches clandestinas.
Paredes
pintadas expresando sentimientos
Paredes
buscando rostros apagados por el pánico del destierro
Por
el dolor de la caída en plena madrugada
Las
paredes nos anuncian tantas cosas
Tantas
palabras enlazadas intentando despegarse y desplegarse,
huir
tras el mendigo
El
campesino o el estudiante
Allí
van las palabras en combate
En
pleno día,
Bajo
la lluvia
Junto
al viento
Saltando
como locas
Como
si fueran libres
Creyendo
en la utopía
Atrapando
la esperanza
No
cesan de brincar entre charco y charco de ilusiones, las mismas
ilusiones que despiertan pegadas a las risas infantiles
Las
mismas ilusiones que corretean a los atletas y se pegan en la nitidez
del tiempo
En
plena madrugada las vemos sonreír.
En
plena madrugada;
las
vemos amándose, sin tapujos y hasta el cansancio,
en
un solo nido perdonándose
Es
entonces cuando en plena luz del día,
y
sin importar las miradas,
el
encuentro se hace una vez más,
Irresistible.
y huelo hasta tu risa
viajero de la noche.
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juego con tu pelo
que es pura noche;
y hueles al néctar de las flores ocupadas.
